Convertir el bug más molesto en un videojuego que apetece jugar. Esto solo se le podía ocurrir a un genio como el padre de Katamari Damacy

Recientemente, tuve ocasión de probar un juego llamado To a T como parte de un evento organizado por ID@Xbox —esto es, juegos indie— con motivo de la GDC 2025. Se trata de un nuevo lanzamiento publicado por Annapurna (Stray, Cocoon) en el que controlas a un chico tratando de hacer una vida más o menos normal, con la particularidad de que solo es capaz de adoptar una pose con los brazos extendidos en forma de T, o 't-pose' como suele decirse en inglés.

Desde un punto de vista jugable, podríamos hablar de To a T como una aventura episódica al estilo de Life is Strange; aunque personalmente te diría que, tras un ratito a los mandos, este es uno de esos juegos "hechos" a la medida de sus propias físicas y al sentido del humor. A querer pasar por un pasillo estrecho y que nuestro joven protagonista se ponga de lado, o que se doble como una alcayata si te acercas demasiado a la pared. No solo es una premisa absurda, sino también omnipresente.

¿Basta esto para darte un juego satisfactorio? ¿Valdría la pena pagar por esto? Pues aunque suene extraño, yo creo que más allá de la gracieta inicial sí que tiene algo de chicha que vale la pena degustar poco a poco a lo largo de su historia. En parte, esto se debe a que el mundo de To a T se refresca constantemente con la originalidad e imaginación japonesa de Keita Takahashi (Wattam, Katamari Damacy) que lo vuelve impredecible y fresco.

Rareza à la Katamari Damacy

To a T va de convertir acciones cotidianas al estilo de comer cereales o cepillarse los dientes en algo genuinamente divertido, y cuando crees que más o menos ya sabes cómo va el juego, pues lo mismo te presenta con toda la naturalidad del mundo una jirafa como un amigo íntimo de nuestro personaje.

Y de la misma manera, también hay un coro de personajes que aparece de cualquier parte para comentar tus acciones, o aprendes que girando muy rápido con los brazos extendidos también vuelas como si fueras un helicóptero. Es un poco el equivalente a convertir My Deer Friend Nokotan en un videojuego.

Lo bonito, como te digo, no es necesariamente el qué, sino el cómo. La idea de tener que vivir con los brazos extendidos podría haber dado para alguna película de cine alternativo, pero funciona bien en el ecosistema de un videojuego porque sabe jugar con tus expectativas y con las interacciones: averiguar los controles para cepillarse los dientes, como decía arriba, tiene su toque de complicación y conforme los descubres ves al chiquillo de turno esforzándose para hacerlo con su extraña situación.

Si te llama la atención lo que ves, te alegrará saber que To a T tiene fecha de lanzamiento confirmada, y no está demasiado lejos: se lanzará el 28 de mayo en PC a través de Steam, así como en PS5 y en Xbox Series X|S.

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